Las particularidades del medio acuático lo convierten
en uno de los escenarios más complejos a los que se tienen que
enfrentar los soldados en sus operaciones habituales. Sin embargo, las nuevas
plataformas tecnológicas ayudan a ir cerrando poco a poco esta brecha con
dispositivos tan avanzadas como los robots submarinos que acaba de
adquirir el Ejército de Tierra en España.
En total, se trata de dos unidades del robot Tortuga XP4
BD diseñado y fabricado por la compañía marsellesa Subsea Tech. Ambos
submarinos no tripulados han sido adquiridos por la Dirección de Adquisiciones
(DIAD) perteneciente al mismo Ejército de Tierra, según explican en la revista
mensual, y están destinadas a servir en el Regimiento de Pontoneros y
Especialidades Nº 12 de Zaragoza.
Con este nuevo ROV (Remote Ocean Vehicle, por sus siglas en
inglés), se pretende dotar a la Compañía de Operaciones Anfibias, del Batallón
de Pontoneros, de una capacidad de exploración, trabajo y rescate
subacuático". Esta nueva plataforma permite "inspecciones submarinas
en condiciones operativas adversas —con baja visibilidad o fuertes corrientes—
y de largo alcance,
El vehículo consta de un chasis de 1 metro de largo por 56,8 centímetros de ancho y 60 de alto donde se incluyen todos los sistemas para realizar las misiones. Además, se ha diseñado para que pueda resistir grandes presiones y la cota máxima de inmersión se sitúa en 500 metros.