viernes, 17 de enero de 2025

Importancia de los valores en la formación de los guardias civiles

 

Alumnado en el Centro de Perfeccionamiento de la Guardia Civil (Valdemoro, 2024).

Fuente: Centro de Perfeccionamiento. Guardia Civil.

El 17 de enero de 1852, el fundador y primer director general de la Guardia civil, Francisco Javier Girón y Ezpeleta de las Casas y Enrile, II Duque de Ahumada y V Marqués de las Amarillas, empeñado en que todos los miembros del Cuerpo tuvieran la instrucción necesaria y se guiaran por la mayor moralidad, dictó una circular sobre la importancia de inculcar valores deontológicos a los miembros del Instituto, especialmente a los de nuevo ingreso.

Hasta tal punto se consideraban importantes estos conceptos que se dictaminó que aquellos guardias civiles que en el plazo de seis meses de haber ingresado en el Cuerpo no cumpliesen con dichas premisas, no serían aptos para continuar en la Guardia Civil.

La Ley de Régimen del Personal de la Guardia Civil configura la enseñanza como un elemento fundamental que tiene como finalidades, entre otras, la formación integral necesaria para quie­nes aspiran a ingresar en el Cuerpo, todo ello para garantizar que los guardias civiles dispongan, a lo largo de toda su vida profesional, de las competencias necesarias para cumplir con efectividad las funciones encomendadas.

El 4 de marzo de 2022 se aprobó el Código de Conducta del personal de la Guardia Civil, una guía que define los valores, principios y normas del comportamiento de sus miembros, los cuales se han ido consolidando desde la fundación del Cuerpo, a lo largo de su devenir histórico, hasta llegar a constituir la mejor muestra del compromiso profesional de su personal y configurar el ni­vel de responsabilidad y de exigencia con los que se presenta ante la sociedad, siendo sintetiza­dos en un Decálogo.

Este Código resulta de aplicación, entre otros, al alumnado de nuevo ingreso a los centros do­centes de formación para la incorporación por acceso directo a la Escala de Oficiales y a la Escala de Cabos y Guardias de la Guardia Civil, en el que se destaca la responsabilidad de los docentes en la imprescindible y sólida formación moral de cara a que los alumnos conozcan y asimilen los valores y principios recogidos en el mismo.