El Archivo General Militar de Guadalajara surge como depósito
documental en 1967 para descongestionar parte de los fondos conservados por el
Archivo del Ministerio del Ejército, manteniendo su denominación de
"Archivo General del Ministerio en Guadalajara" hasta los años
ochenta. Aunque en 1967 ya conservaba unos dos mil legajos de expedientes de
tropa, en agosto de 1969 ingresa parte de la documentación repatriada de Guinea
Ecuatorial y desde 1970 comenzará a recibir con regularidad los expedientes de
reservistas (expedientes reglamentarios de tropa) desde las Zonas y Centros de
Reclutamiento.
Entre 1981 y 1984 el archivo de Segovia transfiere al de
Guadalajara unos quince mil legajos con expedientes de Zona de Reclutamiento y
Cajas de Recluta y otros dos mil legajos de unidades disciplinarias (batallones
disciplinarios y extranjeros de Miranda de Ebro). En 1985 la Asesoría Jurídica
del Ejército remite el fondo o archivo de la Comisión Central de Examen de
Penas y en los años noventa se recibirán los expedientes personales de la UCOS
disueltas, junto con otra documentación. Desde entonces, las transferencias se
producen regularmente, tanto de expedientes de tropa como fondos y expedientes
de prisiones militares. Mutilados, Guardia Mora, campo de concentración La
Alcazaba, batallones de penados de Marruecos, etc., pasando a incorporarse al
Cuadro de Clasificación de Fondos del Archivo.
El Archivo General Militar de Guadalajara, archivo histórico
de titularidad estatal gestionado por el Ministerio de Defensa (Ejército de
Tierra), fue declarado Archivo Nacional en el Real Decreto 2598/1998, de 4 de
diciembre (Reglamento de archivos militares).
En la actualidad ocupa cinco edificios con ocho naves o
depósitos de grandes dimensiones cuyas características responden a las
necesidades y usos cuarteleros de origen (muros de gran espesor, altos techos,
grandes espacios, puertas y ventanales, naves para comedor y dormitorios de
tropa, picadero, cantina, almacenes, etc) sobre los que se ha llevado a cabo
una constante labor de reforma e instalación de mobiliario y estanterías
móviles más adecuadas a su uso como Centro de Archivo. La ocupación actual del
archivo es de unos 22 kilómetros lineales de documentación.